En nuestra serie de cinco entradas de blog, hemos examinado la comunicación no violenta desde diferentes perspectivas y hemos mencionado cómo puede utilizarse en el proceso de mediación. En esta última entrada de la serie, hablaremos de la comunicación no violenta desde la perspectiva del mediador.
En primer lugar, para establecer una comunicación no violenta en el proceso de mediación, el mediador ayuda a establecer un vínculo entre las personas. Explica a las personas que el objetivo del proceso de resolución de conflictos es comunicarse basándose en sus necesidades, no imponer sus propios deseos. Esta comunicación será posible gracias al apoyo del mediador a las personas en conflicto.
A continuación se resumen los pasos a seguir en la resolución de conflictos mediante la comunicación no violenta, que se explican detalladamente en nuestros artículos anteriores:
- Una de las personas en conflicto expresa sus necesidades. Esto no siempre ocurre de acuerdo con los métodos de comunicación no violenta. En estos casos, el mediador les apoya formulando preguntas para descubrir las necesidades subyacentes a las declaraciones.
- Las personas escuchan las declaraciones de los demás sin juzgarse ni ponerse a la defensiva, centrándose únicamente en sus necesidades. Para ello, el mediador utiliza técnicas de comunicación como la reflexión y el resumen.
- Las personas se transmiten mutuamente lo que entienden de sus expresiones. Esto continúa hasta que comprenden plenamente las necesidades de la otra persona. El mediador debe asegurarse de que las personas comprenden las necesidades de los demás.
- La cuarta etapa es la de la empatía. Para lograrlo, el mediador se asegura en primer lugar de que las personas se escuchen realmente. Es un paso importante aceptar la existencia de las necesidades del otro, más que si están o no justificadas.
Mientras todo este proceso continúa, el mediador tiene algunas obligaciones. El mediador asume el papel de tercero imparcial en el proceso. El principio de imparcialidad se explica claramente a los individuos en el discurso de apertura al principio del proceso de mediación. Además, se pueden explicar a los individuos los pasos de la comunicación no violenta y explicarles que, si se sigue este método, será más fácil llegar a una solución.
Como ya se ha dicho, el mediador hace preguntas para revelar las necesidades en las expresiones de las personas. Cada declaración es el reflejo de una necesidad. A veces no será fácil descubrir las necesidades que hay detrás de las declaraciones. Algunas personas creen que cuanto más repitan algo, más se entenderá. En estos casos, la tarea del mediador será identificar la necesidad y garantizar que el proceso continúe.